La pérdida auditiva resurge del olvido como efecto secundario de la diabetes
Hoy día está plenamente documentado que, si se padece diabetes, el riesgo de pérdida auditiva es mayor.
En los últimos años, la pérdida auditiva o hipoacusia se ha reconocido con frecuencia como un efecto secundario de la diabetes.
En 2019, un número especial de la revista «Seminars in Hearing» publicó una actualización de los artículos científicos y las investigaciones disponibles sobre la relación entre la diabetes y la pérdida de audición.
Hoy, esta relación queda de nuevo evidenciada en el sitio web de los CDC (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE. UU.).
«La diabetes puede provocar daños graves en los nervios de distintas partes del cuerpo, como las manos, los pies, los ojos y los riñones, y también puede perjudicar a los nervios de los oídos. Con el tiempo, los altos niveles de glucemia pueden dañar los vasos sanguíneos pequeños y los nervios del oído interno y, por otro lado, los bajos niveles de glucemia pueden afectar perjudicialmente a la transmisión de las señales que emite el nervio desde el oído interno hasta el cerebro. Ambos tipos de lesiones nerviosas pueden provocar pérdida de audición», expone el texto de los CDC.
Por todo ello, los CDC aconsejan revisarse la audición cada año si se tiene diabetes.
En el sitio web de la Asociación Americana de la Diabetes también se menciona la relación entre esta afección y la pérdida auditiva:
«La diabetes y la pérdida de audición son dos de los problemas de salud más extendidos en los Estados Unidos. En nuestro país hay más de 34 millones de personas con diabetes, y se estima que 34,5 millones tienen algún tipo de pérdida auditiva. Se trata de dos grupos de gran tamaño, y parece que gran parte de ellos se solapan. La prevalencia de pérdida auditiva es el doble en las personas con diabetes que en las que no padecen esta enfermedad».
Estudios recientes
Hace poco, el estudio «Diabetes is a Risk Factor for Hearing Loss in Older Adults: Results of a Community Screening Programme» (La diabetes como factor de riesgo de la pérdida auditiva en adultos mayores: resultados de un programa de cribado de población) ha concluido que la diabetes es un factor de riesgo independiente para la aparición de pérdida auditiva moderada o más grave entre las personas mayores que no viven en residencias.
Otro estudio reciente, «Synergistic effect of smoking on age‑related hearing loss in patients with diabetes», (Efecto sinérgico del tabaquismo en la pérdida auditiva relacionada con la edad en pacientes con diabetes) determinó que sufrir diabetes y ser fumador suponen una mala combinación en cuanto al riesgo de desarrollar una pérdida auditiva relacionada con la edad.
Fecha: 08/12/2021
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