Como en todo, una correcta utilización de nuestro cuerpo con un programa reglado de entrenamiento puede, al igual que en un gimnasio, mejorar nuestra calidad auditiva, se tenga o no pérdida auditiva. Al igual que un ojo entrenado es capaz de distinguir matices de color en un cuadro o efectos visuales o perspectivas que las personas comunes no son capaces de ver si no se lo hacen notar, un oído entrenado es capaz de percibir sonidos y armónicos que ayudan a una correcta audición de la voz y a una escucha placentera y privilegiada de la música.

Seguro que se ha encontrado alguna vez personas que en un concierto o al comprar un reproductor de música le dicen “que mal se oye éste teatro, deberían hacer algo”, o “fíjese la diferencia entre estos dos reproductores y apreciará la distinta calidad de uno u otro”, y sin embargo, a usted le parece todo igual. Ésto, como en todo en la vida, es una cuestión de aprendizaje, en que las personas con un oído entrenado aprenden a buscar los matices que lo hacen diferente para ellos.

Lo que hacemos con un entrenamiento auditivo no es mejorar la sensibilidad acústica (audiometría), sino enseñar a utilizar mejor lo que ya se tiene. Una mejor utilización de lo que se tiene, sea mucho o poco, puede ser percibida como una magnífica ayuda en las ocasiones donde nos falta un empujón para poderlas resolver. A aquellos que tengan una audición correcta y quieran mejorar su rendimiento o su percepción musical, les resultará útil para distinguir mayores maíces acústicos y poder disfrutar más y mejor de la música, así como para percibir las voces más claramente en situaciones de dificultad. A aquellos que presenten alguna alteración auditiva, esté corregida con prótesis auditiva o no, les puede proporcionar el empujón que les falta para mejorar el desempeño acústico en determinadas ocasiones, haciendo que disminuya el esfuerzo de atención necesario para entender la conversación bien, especialmente en lugares con ruido o con personas que hablan muy bajo.

Si cree que puede resultarle útil entrenar su oído, pregúntenos al respecto, evaluaremos su situación auditiva y calibraremos lo que necesita para obtener mejor rendimiento, oiga usted bien o no, use prótesis auditiva o no e independientemente de su marca o procedencia.